miércoles, 27 de junio de 2012

Los tratamientos de conductos

La pulpa dental es un órgano que presenta ciertas características que le son muy particulares; la principal es que se encuentra rodeada por tejidos duros, como son las paredes dentarias, y por eso es que su capacidad de reacción ante las agresiones también es bastante particular. Dichas agresiones pueden ser químicas, físicas, por microorganismos, estímulos mecánicos o radiaciones. Existen diferentes formas de clasificar las enfermedades pulpares, y una manera lógica es hacerlo de acuerdo con los síntomas y signos con que se manifiestan, según lo describe Diversos autores. No obstante, cuando estos síntomas se hacen repetitivos con dolores agudos en la zona, hacen necesario la realización de un tratamiento de conducto, que no es mas que la extracción de ese tejido de la pulpa inflamado para ser reemplazado por un material compatible con el cuerpo humano y así la el diente puede reintegrarse en sus funciones en el arco dentario. Estos procedimientos se hacen hoy en día mas fáciles a través de tecnología como motores de velocidad y torque controlado, localizado electrónicos de ápices, y sistemas de inyección de sellado del conducto. Pero el éxito del tratamiento esta en un buen seguimiento de la técnica anestésica y de la cantidad de concentración plasmática del vital fármaco en los pacientes según su peso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario